
El 5 de junio es un día de celebración, de agradecimiento por la vida en la tierra y de esperanza de un mundo mejor para los que vendrán.
Pero festejar con responsabilidad ciudadana , también ser realistas por el enorme daño que nos hemos causado al no cuidar el ambiente, y asumir con determinación y optimismo el reto de mejorar nuestro desempeño ambiental.Es importante entonces pensar que el mundo no nos pertenece, nos ha sido prestado para que vivamos en él y lo utilicemos con sabiduría.
Nuestro planeta nos brinda todos los recursos naturales que necesitamos para alimentarnos, construir nuestras viviendas, tener luz, transportarnos, vestirnos, etc. Mira un segundo a tu alrededor... todo lo que ves - papel, lápiz, computadora, goma, etc.- se obtiene, directa o indirectamente, del ambiente, por lo cual es importante que aseguremos su capacidad de continuar proveyéndolos.Si destruimos el ambiente estaremos perjudicando a nosotros mismos, a nuestros hijos y a nuestros nietos.
Cuidar el mundo es cuidarnos y esa es otra muy buena razón ¿no te parece?